Cadillac Eldorado convertible de 1976
El Cadillac Eldorado descapotable de 1976 fue considerado el último de los verdaderos coches americanos de ensueño. El coche tenía una carrocería construida a mano, y estaba propulsado por un motor que conseguía 16 millas por galón de media. Venía con un motor V8 estándar que podía ir de 0 a 100 km/h en menos de seis segundos y tenía suspensión independiente para sus ruedas delanteras.
Seguridad, mantenimiento y fiabilidad
El Cadillac Eldorado tiene fama de ser uno de los descapotables más seguros del mercado. Tanto el asiento del conductor como el del acompañante están equipados con airbags, que ayudan a proteger a los ocupantes en caso de accidente. El coche también cuenta con vigas de impacto lateral que ayudan a distribuir las fuerzas de choque lejos de los pasajeros en caso de colisión.
Diseño interior y características especiales
El interior del Cadillac Eldorado descapotable fue diseñado por Bill Mitchell, que también diseñó el Corvette Stingray. El coche tenía aire acondicionado, elevalunas y cierre eléctricos, y un volante inclinable/telescópico.
Motores y transmisión
- El motor básico es un V8 de 3,8 litros.
- Nuestro motor se trata de un V8 sobrealimentado con 8.2L alcanzando los 400 CV, también está equipado con la transmisión automática de 3 velocidades.
El Cadillac Eldorado descapotable de 1976 es un coche clásico que ha superado la prueba del tiempo. Es uno de esos coches que usted podría conducir durante años y nunca se cansaría de él. Lujo, seguridad, fiabilidad y diseño intemporal son algunas de sus principales características.
Elvis Presley, Marilyn Monroe y Richard Nixon algunos de sus propietarios
El mítico cantante personalizó el interior de un Cadillac Eldorado del año 1956 de 3ª generación con unas alfombras moradas, tapizó los asientos de blanco y les puso tapetes bordados con sus iniciales (EP), una guitarra y notas musicales. Joe DiMaggio, segundo marido de Marilyn, le regaló a esta varios Cadilllac, entre estos un Eldorado, el cual usaba en su vida pública para acudir a los estrenos.
Y nada más que el trigésimo séptimo presidente de los Estados Unidos entre 1969 y 1974, Richard Nixon, usó este mismo modelo de visita a las Repúblicas Socialistas Soviéticas en 1972.
La producción de este modelo convertible fue tan solo de 9135 vehículos, sin lugar a dudas, un complemento perfecto para acompañar un evento que requiera la búsqueda de prestigio, singularidad y un recuerdo imborrable.